Si bien muchos tenían ciertas expectativas con el gobierno de Giaco en la ciudad, poco tiempo fue suficiente para tirar por tierra toda la esperanza de algo mejor, rápidamente el rostro afloró tras la máscara.
No hace falta hacer un recuento de todas las traiciones de Giaco, ni tampoco de su mala gestión, pero esta sincera indignación por la aprobación del boleto estudiantil desnuda su pensamiento empresarial, totalmente alejado del bien común, de la sociedad.
Cuando entenderá Giaco y los que le precedieron y los que le seguirán, que TRANSPORTE, es TRANSPORTE PUBLICO, la palabra público no es un simple aditamento para que quede bonito, sino que lo público indica que debe ser PARA TODOS, para que TODOS podamos utilizarlo, por lo que los aumentos no tienen fundamento, como tampoco que deba dar GANACIA.
En términos de ganancia piensan los empresarios que nada les importa lo público sino que piensan en mercado, por lo tanto en egoísmos e individualidad, no piensan en todos! menos en estudiantes, salvo para formarlos.
Por lo que debe aumentar impuestos, o mejor dicho, empezar a cobrar impuestos a los grandes contribuyentes, para de esa manera mantener un transporte en buenas condiciones y barato!, para que TODOS podamos usarlo, no importa que sea deficitario, DEBE SER DEFICITARIO! de esa manera los ingresos tributarios de la municipalidad banquen el sistema, un sistema solidario, inclusivo, y PARA TODOS.
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